sábado, 11 de enero de 2014

No sere otra en tu lista

CAPITULO 4


Fue tan difícil dormir está noche, tengo miedo. Estoy viviendo con unos delincuentes, ¿cómo podría dormir tranquila? Tengo miedo que alguien entre y me haga lo peor. Necesito un plan para escapar de este lugar....

Salgo de mi habitación y comienzo a buscar a Matt, por suerte no lo encuentro por ninguna parte, al parecer no está. Bajo hasta la entrada y me acerco a la puerta, pero cuando estoy a punto de abrirla y escapar alguien me llama.

-¿De nuevo escapando, señorita?-me pregunta Zayn.

Me sobresalto al escucharlo y me doy la vuelta rápidamente. Oh, me había olvidado de él.

-No, ¿dónde está Matt?

-Él tuvo que salir, pero me ordenó que te cuidara para que no intentaras escaparte de nuevo.

-No me estaba escapando.

-Claro, dile eso alguien que te crea.

-No necesito que tú me cuides, Zayn.

-Eres una niña, necesitas cuidados.

-¡No soy una niña! ¡Tengo diecisiete años!

-De acuerdo, 'señora', de todas formas tengo que cuidarte.

-Puedo hacerlo sola. Y otra cosa, no me llames 'señora' mi nombre es _______.

-Oh, lo lamento, nena.

Pongo los ojos en blanco. ¿Puede existir un chico más exasperante que él?

-No soporto verte.

Me alejo e él y subo las escaleras para ir hasta mi habitación, pero antes que pueda entrar siento sus manos sobre mi cintura y su respiración en mi cuello, lo cual me provocan escalofríos. Oh, cielos. Se siente bien.

-¿Qué te ocurre?-pregunto molesta.

-¿Por qué no te agrado?

-Suéltame -jadeo.

-Antes dime.

-¡Suéltame, Zayn! ¿Quieres que el diga a Matt qué te mate?

-Si es por ti quizá

¿Morir por mí? ¿De qué está hablando? Primero es el chico rudo, ahora quiere morir por mi, quizás solo este bromeando. Qué chico.

-¿Por mí?

-Claro, ese es mi trabajo, dar todo por ti, para que estés a salvo.

-Como sea, ¿podrías soltarme de una vez?

-¿Me vas a mentir que no te gusta estar así?

Sentir su respiración en mi cuello, sus manos sobre mi cintura, oler su perfume, tiene razón, no puedo mentir. Me pone un poco nerviosa. Oh, pero qué mierda estoy pensando.

-No me gusta, Zayn, se supone que me cuidarás no que me seducirás.

-¿Crees que te estoy seduciendo? –susurra en mi oído.

-Por supuesto.

-Eres muy inteligente, preciosa, pero creo que tienes razón -Zayn me suelta- Estoy aquí para cuidarte, Matt me matará si me ve contigo.

-Gracias, si vuelves a hacer eso yo misma te mataré.

-Claro.

-Ahora, si no te molesta estaré en mi habitación.

-¿Cómo se qué no intentará escapar otra vez?

-Confía en mí.

-Creo que estaré contigo.

-No, no te quiero cerca.

-¿Por qué no?-se acerca a mí.- ¿Acaso te pongo nerviosa?

-¡No! Deja de insinuar eso, Zayn., le diré todo a Matt.

-Si lo haces me matará ¿quieres qué muera?

-¿Y por qué no?

-Créeme, si Matt no tuviera nada que ver contigo te tendría en mi cama. Me encanta verte molesta. Luces... Sexy.

Oh, ¡qué pervertido! Vaya forma de hablar.

-¿Qué? ¿Qué carajos tienes en la cabeza, Zayn? Nunca me acostaría contigo. Ni loca.

-¿De verdad lo crees así?

-Lo creo.

-Créeme, no muchas tienen el privilegio de tener una mágnifica noche conmigo.

Frunzo el ceño.

-Creo que tienes tu ego demasiado elevado, yo no soy así. No quiero ser otra en tu lista ¿entiendes? Ahora, aléjate de mí.

-Eres virgen, ¿no es así?

Mi boca se abre. ¿Cómo se atreve a preguntar eso?

-Eso... eso es algo que no te interesa.

Antes de que él pueda decir otra palabra entro a la habitación y la cierro con seguro.
Me recargo en ella y me siento en el piso. ¿Quién se cree? ¿Cómo rayos puede decir eso? Jamás estaré en su cama, ni loca. No, no, no. El pensamiento me estremece.

Aunque no puedo mentir, me pone nerviosa, no entiendo por qué. ¡No! ¡Qué mierda estoy diciendo! Tengo que alejarlo de mí.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario